sábado, 4 de septiembre de 2021

Armando Buscarini

 

Con el alma latiendo por la gloria
y flotante a los vientos mi melena,
iré diciendo al mundo con voz fuserte,
¡con voz en la que vibre mi alma entera!:
—Es verdad que yo sufro; pero oídme:
¿qué me importa sufrir si soy poeta? 

                         *********

Por un beso que te diera
has de ir al cementerio
una noche a contemplar
la soledad de los muertos…

Y cuando los hayas visto
de la noche, en el misterio,
entonces, ser adorado,
entonces… ¡te daré el beso!

                  *********

Más que un gran manicomio 

es un viejo convento

con ventanas románicas 

el lugar donde estoy.


Se olfatea la muerte, 

aquí, a cada momento

y hay un perro que siempre

va por donde yo voy. 



4 comentarios:

  1. Bonitos poemas de Boscarini, querido amigo.
    Agradezco tu visita y tu traducción del comentario en inglés. Yo, como soy del bachillerato de séptimo y reválida, estudié francés y no iglés como estudia ahora todo el mundo, por lo que he tenido que valerme también del traductor de Google.
    Como ves, mi blog está un poco desatendido, por eso tardo en ver los comentarios y en contestarlos.
    Siempre es agradable verte por él.
    Una abrazo.

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  2. Gracias por pasar por aquí, es un honor que un poeta escriba algo aquí. Abrazos.

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  3. Me encanta esta elección que hiciste hoy de Buscarini. Por alguna razón me identifico con sus versos...
    "—Es verdad que yo sufro; pero oídme:
    ¿qué me importa sufrir si soy poeta?"
    Por supuesto, yo solo soy un intento, pero me vale...
    Abrazos de otoño. ¡Cómo vuelan las estaciones! madre mía... 🙋‍♀️

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  4. Hola, sí, cómo pasa el tiempo, aunque yo nací un 28 de febrero, así que hago los años cada 4 años... Jajaja, es broma. Gracias por pasar.

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