Me enseñaste a vivir, hermana mía,
me sacaste de arenas pantanosas,
me guiaste por tierras nebulosas
e izaste mi bandera cuando ardía.
De ti aprendí a escribir y la poesía,
el arte y la belleza de las cosas,
el dulce y tierno aroma de las rosas
y a saber qué es la fe y la valentía.
Se levanta tu padre orgulloso
de una hija tan noble y tan humana;
cruzaría mamá el ancho mar
y daría la camisa por mi hermana.
Te desean Jere, Andrea y Generoso
que tengas feliz día del Pilar.
jueves, 11 de octubre de 2012
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Jo, es precioso. Me he emocionado ... Yo también he aprendido un montón contigo y sobre todo eres muy bueno y alguien en quien puedo confiar.
ResponderEliminarVaya sorpresa bonita.
Un abrazo fuerte.
Pero yo no te he enseñado a escribir, eso no se puede enseñar ni aprender, se nace con ese don.
ResponderEliminarYa sabes quién tiene el don en nuestra casa pa escribí y no soy yo precisamente. Lo hemos hecho entre papa, mama y yo. Se me ocurrió por el día del Pilar y me salió de corrío.
ResponderEliminarEres la mejor, Pilli, y con pasión de hermano.