"En mi humilde SONETO - el único que
deseo publicar- comprobarás mi ansie-
dad de ayer , de hoy y de siempre, porque
mi vida quedó marcada, al irse ella, para
la eternidad.."
(A.P.)Madre mía, yo sé que fuiste bella,
de porte señorial y majestuoso,
y que tu rostro, cual ninguno hermoso,
deslumbraba lo mismo que una estrella.
Por ser tan niña, como una centella
se me esfumó su rostro luminoso,
y por eso, con gesto doloroso,
a todos pregunté: "¿Cómo era Ella?..."
Y supe que era linda, era graciosa,
demasiado perfecta y armoniosa
para vivir en este ingrato suelo.
Y en plena juventud, llena de galas,
batió un día sus milagrosas alas
y se perdió en la inmensidad del cielo!
Este soneto está sacado del libro CRISOL DE AMOR( figuras, reflexiones, y poesía de Andalucía), por ÁFRICA PEDRAZA DE ÁLVAREZ. Al leerlo te das cuenta de cómo se escribe con el sentimiento, con el corazón.
Es que no hay nada como una madre...
ResponderEliminarUn beso.